Las empresas de inserción son organizaciones sin ánimo de lucro que buscan mejorar la situación de personas en riesgo de exclusión social o laboral, como personas con discapacidad, jóvenes sin empleo, personas en situación de pobreza, entre otros, a través de la creación de empleos temporales y de formación.
La principal función de una empresa de inserción es proporcionar a estas personas en situación de vulnerabilidad la oportunidad de acceder al mercado laboral, brindándoles un empleo temporal y un entorno de trabajo seguro y formativo. Las empresas de inserción también ofrecen formación y capacitación en habilidades laborales y profesionales, para que los trabajadores puedan mejorar sus competencias y tener mayores oportunidades de encontrar un empleo a largo plazo.
Además, las empresas de inserción tienen un papel importante en la sensibilización de la sociedad y en la lucha contra la exclusión social y la discriminación laboral, contribuyendo así al desarrollo social y económico de la comunidad en la que operan.